Como hemos visto en anteriores artículos del blog, en la actualidad es muy importante que nuestro negocio tenga una gran presencia en Internet. La sociedad actual es digital y la tendencia es claramente ascendente: las nuevas generaciones son nativas digitalmente. Por eso debemos apostar por la digitalización si no queremos perder peso ante nuestra competencia.
En el sector de la hostelería y la cocina en general ha aumentado mucho el contenido: han aparecido muchos influencers y constantemente aparecen tendencias (foodie, veggie, etc.) a su alrededor. Esto ha hecho que los restaurantes y bares usen las redes sociales y páginas web (entre otros) para mostrar sus productos y servicios y atraer a potenciales clientes. ¿Quién no investiga en internet un restaurante antes de hacer la reserva?
Ahora que ya hemos decidido hacer una apuesta por el marketing online: ¿por dónde empezamos?
Planifica tu estrategia digital
Antes de empezar planifica tu estrategia de marketing digital. Uno de los errores más comunes es la poca planificación de la estrategia digital. Mucha gente piensa que con solo crear un par de perfiles en las redes sociales más concurridas y con una página web básica ya tienen suficiente. Esto es un error.
Puedes ponerte en manos de una agencia de marketing digital, ya que las posibilidades son muchas y sin experiencia es difícil sobresalir.
Pero si decides llevarlo tú mismo, lo primero que debes hacer es un plan de marketing digital: auditoría de redes sociales (competencia directa, competencia online, redes sociales donde están presentes, tipo de contenido, etc.), estudio de mercado, estudio de palabras clave, etc. Esto te permitirá conocer mejor el sector, ver que está haciendo la competencia, sacar buenas ideas y descartar lo que no les vaya tan bien.
También es muy importante conocer a tu cliente o cliente potencial para ofrecerles contenido de su interés. Te recomendamos crear calendarios editoriales mensuales: es una manera de organizar correctamente y planificar tu contenido.
Publica contenido de calidad
Una vez decidida la estrategia digital (redes sociales donde publicaremos, tipo de página web, etc.) es el momento de publicar el contenido. Es muy importante que este contenido sea de calidad y refleje la imagen de marca deseada. Para que nuestras publicaciones destaquen entre la infinita cantidad de contenido disponible en Internet, debemos tener una voz propia y ofrecer contenidos que interesen al público.
El marketing de contenidos es el que te ayudará a destacar entre toda la competencia y a fidelizar a los seguidores. Publica fotos de calidad y contenido que les pueda interesar, la reputación digital depende de esto.
Te facilitará mucho las cosas usar herramientas digitales para publicar los contenidos y no tener que estar las 24 horas pendiente. Hay herramientas que te ayudarán a programar el contenido, otras que te dan mucha información para analizar tus publicaciones, etc. Busca en Internet, hay muchas posibilidades y tarifas, incluso hay herramientas con servicios completamente gratuitos.
Interactúa con tus clientes
Es fundamental que los clientes se sientan partícipes. Ahora las marcas ya no venden productos, las marcas son productos: sus ideales, su imagen, etc. es lo que conduce a los clientes a consumir sus productos y servicios. Por eso, es importante que la imagen y tono de tus publicaciones reflejen tus ideales. También, es clave que interactúes con ellos. Ahora las posibilidades son infinitas: encuestas, juegos, promociones, preguntas, etc. Y por supuesto, responde a los comentarios rápidamente, todo el mundo quiere que le atiendan correctamente. Si tardas mucho en responder puedes transmitir al cliente que no te importa mucho.
Actualiza la información constantemente
Internet es la puerta de entrada a tu negocio y por lo tanto debes tener siempre la información actualizada. En todos tus perfiles, tanto en redes sociales como en Google o en la página web, pon los horarios y demás información (teléfono de contacto, día de fiesta, si estás de vacaciones, etc.).
Trabaja el posicionamiento SEO
El SEO (Search Engine Optimization) es el posicionamiento orgánico, es decir, la optimización de nuestra web en los motores de búsqueda (por ejemplo Google) para aparecer en las primera posiciones.
Para mejorar el posicionamiento de tu página web y aparecer en las primeras posiciones de los motores de búsqueda online debes trabajar varios parámetros: palabras clave, optimización de imágenes, rapidez del sitio web, seguridad del sitio, etc. Esto ya es un poco más complicado y es preferible confiar en algún experto.
Haz campañas de email marketing
Gracias a la digitalización de nuestro negocio podemos recolectar grandes cantidades de información que nos puede servir para conocer mejor a nuestros clientes y optimizar nuestro servicio, y también nos puede servir para hacer email marketing o también conocido como marketing por correo electrónico (para acciones comerciales). Hay diferentes herramientas que nos ayudarán a enviar correos.
Intenta poner siempre asuntos que sean llamativos sin abusar de los signos tipográficos. No satures a los usuarios con demasiados correos, ofrece contenido de calidad y adáptalo al momento en que se encuentra el usuario: no es lo mismo un usuario que se acaba de registrar a tu newsletters que otro que ya lleva tiempo suscrito.
Ve revisando las estadísticas de apertura e interacción para mejorar tus comunicaciones.
Invierte en publicidad
Tanto en los buscadores como en redes sociales, la publicidad es muy interesante: con importes no muy elevados podemos llegar a mucha gente y hacer que el ROI (retorno de la inversión) sea positivo.
La publicidad online (Facebook ads, Google ads) tiene una gran ventaja respecto a la demás publicidad: gracias a los algoritmos, el anuncio llega a usuarios que han buscado cosas similares en Internet y por lo tanto están interesados en tus productos.
Una vez analizados los principales puntos para potenciar la estrategia digital de nuestro negocio seguro que te asalta una duda: ¿contrato una agencia o me las apaño solo? La respuesta es simple: depende de tus objetivos.
Si simplemente quieres mantener la información actualizada y publicar contenido de vez en cuando en redes sociales seguramente puedes prescindir de contratar a un experto. Pero si tenemos en cuenta el gran beneficio que puede suponer tener una estrategia digital bien optimizada, la inversión puede valer la pena.